UNO MENOS
Salvador Farfán Infante
La adicción a la pornografía está considerada una variante de la adicción al sexo y forma parte de las denominadas adicciones comportamentales. Estos son sus principales síntomas:
Consumo compulsivo. Las personas con adicción al porno a menudo pasan gran cantidad de tiempo consumiendo pornografía. Esto implica visualizar porno a menudo y probablemente hacer un uso compulsivo de la masturbación.
Pérdida de control. Un sello distintivo de la adicción al porno es la incapacidad de controlar el consumo de porno. Las personas afectadas por este problema continúan involucradas en el comportamiento a pesar de las consecuencias negativas.
Tolerancia. Al igual que otros comportamientos adictivos, la adicción a la pornografía causa un aumento del consumo con el tiempo. De esta forma, los afectados pueden necesitar formas de pornografía más explícitas o extremas para lograr el mismo nivel de excitación. También pueden padecer ansiedad o malestar cuando se interrumpe el consumo de pornografía (síndrome de abstinencia).
Consecuencias negativas. La adicción a la pornografía suele provocar importantes consecuencias negativas. Afecta a la relación de pareja (incluida la disminución de relaciones sexuales), crea problemas de comunicación y conflictos relacionados con expectativas poco realistas. También puede provocar disminución de la productividad, problemas financieros y un impacto en la salud mental.
Impacto emocional. La adicción a la pornografía puede provocar angustia emocional y psicológica. Estas personas experimentan sentimiento de culpa, vergüenza y baja autoestima, debido a la incapacidad de controlar el consumo de porno. En algunos casos puede provocar ansiedad, depresión u otras afecciones de salud mental.
Interferencia con la vida diaria. La adicción al porno interfiere con aspectos vitales como el trabajo o las actividades sociales. También puede provocar disminución del rendimiento, pérdida de motivación y disfunción sexual.
Tratamiento de la adicción a la pornografía
El tratamiento de un adicto al porno generalmente implica la combinación de diferentes enfoques terapéuticos. La terapia cognitivo-conductual y la terapia de pareja se utilizan para identificar pensamientos y creencias distorsionados sobre la pornografía. Al igual que para desarrollar habilidades de afrontamiento y establecer comportamientos sexuales saludables. La terapia de grupo y la terapia individual también pueden ser de gran ayuda. Si lo deseas puedes realizar el test de adicción al sexo en este enlace.
No todo aquel que consume pornografía es adicto al porno. Sin embargo, las personas con otras adicciones (como la adicción a la cocaína) deben tener particularmente en cuenta las posibles consecuencias del consumo de pornografía.
Debemos resaltar que no todas las personas que consumen porno son adictas al sexo. Sin embargo, deberíamos tener en cuenta en todo momento los posibles efectos que tiene el consumo de pornografía, hacia uno mismo y hacia los demás. Existen formas alternativas de entretenimiento o exploración sexual más saludables que la pornografía.
¡La próxima semana estaremos compartiendo otra adicción comportamental que es “LA ADICCIÓN A LAS COMPRAS!
Fuente: Clinica y Psicología Ivatad. Esp