UNO MENOS
Salvador Farfán Infante
Los límites personales son los límites y las reglas que nos imponemos en las relaciones. Una persona con límites sanos puede decir «no» a los demás cuando quiere, pero también se siente cómoda con la intimidad y las relaciones cercanas.
¿Tipos de los límites personales?
Los límites físicos: se refieren al espacio personal y al contacto físico. Los límites físicos saludables incluyen la conciencia de lo que es apropiado y lo que no en diversos entornos y tipos de relaciones (¿abrazos, apretones de manos o besos?). Los límites físicos pueden ser violados si alguien lo toca a usted cuando no quiere que lo haga o cuando invade su espacio personal (por ejemplo, hurgando en su habitación).
Los límites intelectuales: Se refieren a los pensamientos e ideas. Los límites intelectuales sanos incluyen el respeto por las ideas de los demás y saber qué tipo de plática es adecuada (¿debemos hablar del clima o de política?). Los límites intelectuales se violan cuando alguien desestima o menosprecia los pensamientos o ideas de otra persona.
Los límites emocionales: Se refieren a los sentimientos de una persona. Los límites emocionales saludables incluyen limitaciones sobre cuándo compartir y cuándo no compartir información personal. Por ejemplo, compartir gradualmente la información personal durante el desarrollo de una relación, en vez de revelar todo desde el principio. Los límites emocionales se violan cuando alguien critica, menosprecia o invalida los sentimientos de otra persona.
Los límites sexuales: Se refieren a los aspectos emocionales, intelectuales y físicos de la sexualidad. Los límites sexuales saludables implican la comprensión y el respeto mutuo de las limitaciones y los deseos de la pareja sexual. Los límites sexuales pueden ser violados con el contacto sexual no deseado, la presión para realizar actos sexuales, las miradas lascivas o los comentarios sexuales.
Los límites materiales: se refieren al dinero y las pertenencias. Los límites materiales sanos implican el establecimiento de límites sobre lo que va a compartir y con quién. Por ejemplo, puede ser apropiado prestar un coche a un miembro de la familia, pero probablemente no a alguien que recién haya conocido esta mañana. Los límites materiales se violan cuando alguien roba o daña las pertenencias de otra persona o cuando la presiona para que le regale o le preste sus pertenencias.
Los límites de tiempo: se refieren a cómo una persona utiliza su tiempo. Para tener unos límites de tiempo saludables, una persona debe reservar suficiente tiempo para cada faceta de su vida, como el trabajo, las relaciones y los pasatiempos. Los límites de tiempo se violan cuando otra persona exige demasiado tiempo a la otra.
Los límites personales son los límites y las reglas que nos imponemos en las relaciones. Una persona con límites sanos puede decir «no» a los demás cuando quiere, pero también se siente cómoda con la intimidad y las relaciones cercanas.
Se dice que una persona que siempre mantiene a los demás a distancia (ya sea emocionalmente, físicamente o de otra manera) tiene límites rígidos. Por el contrario, alguien que tiende a involucrarse demasiado con los demás tiene límites porosos.
Fuente: TherapistAid.com