Inter de Miami se coronó campeón, del torneo binacional entre la MLS y los equipos de la Liga MX, al ganar en penaltis al Nashville 10 A 9.
Cada equipo tuvo su estrategia, los del Inter basaron su juego en la posesión del balón tratando de penetrar por las bandas o con una genialidad de Lio Messi, que da una cátedra de encontrar espacios entre líneas, y aprovechar las pocas oportunidades que tuvo para ayudar a su equipo, Así fue cuándo al minuto 24 el argentino recibió fuera del área, se quita al central Zimmerman y le pega de zurda al ángulo. Tremendo golazo.
A pesar de ir abajo en el marcador. Nashville mantuvo su estilo de juego basado en la recuperación del balón, en su cancha con 9 y hasta 10 hombres muy juntos para evitar los espacios y romper las líneas de pase del rival en varias ocasiones, para contra golpear con su mejor hombre en alemán Mukthar, sin embargo, fueron fallido sus intentos. Su gran virtud fue no desesperarse mientras el Inter intentaba aumentar la ventaja, de forma infructuosa, la ventaja mínima era un riesgo alto.
Al minuto 57 Calllender, remata dentro del área, Cremaschi rechaza con la rodilla, pero rebota en la pierna del arquero para incrustarse en la portería, para el empate.
Llegaron los penales, previamente ambos cuadros tuvieron la oportunidad de anotar, haciendo un final emocionante. Desde los once pasos se tiraron 22 penales y se fallaron tres, un alto índice de eficacia.
Finalmente, el portero local, Panicco, falló su tiro anunciando lo demasiado para que los de Miami levanten la corona y pintarla de Rosa.
De la mano de Messi, quien a la hora de recibir el trofeo le coloco al antiguo capitán, el gafete y levantar la copa juntos, en una señal de humildad y compañerismo.
Total, él lleva 44 títulos en su palmarés. Además, fue el goleador del torneo con 10 tantos.