- El político francés ofreció la conferencia magistral La Revolución Ciudadana en la era de la Inteligencia Artificial
- En la FCPyS dijo que vivimos el saqueo de la naturaleza, pero también de una manera de vivir, de las conquistas sociales
Ciudad Universitaria, CDMX, 27 febrero 2025.- Antes pensábamos que mañana sería mejor; hoy, en Europa, ya nadie piensa eso. Por primera vez se perdió la narrativa de un futuro progresista. Racismo, xenofobia, odio, son parte de la ideología de la derecha y la ultraderecha, que vende temor. Se trata de la simplificación del pensamiento político, expresó Jean-Luc Mélenchon.
Alejandro Chanona Burguete, director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) le dio la bienvenida al fundador y líder del movimiento France Insoumise (Francia Insumisa), quien impartió la conferencia magistral “La Revolución Ciudadana en la era de la Inteligencia Artificial”.
El político francés destacó que las revoluciones ciudadanas actuales son distintas de las socialistas: tienen la meta de solucionar problemas. “Quieren intervenir en la vida política y hacer crecer el nivel de conciencia política”.
En el auditorio Ricardo Flores Magón recordó que desde la caída del muro de Berlín y el fin del comunismo de Estado “no pasó nada en Europa, sino el crecimiento del neoliberalismo duro”.
Se llegó a un punto donde el pacto histórico entre la democracia y el capitalismo, que se presentaban como las dos caras de una misma realidad, se rompió. “Vivimos el saqueo de la naturaleza, pero también de una manera de vivir, de todas las conquistas sociales en Europa”, refirió.
Para que se rompa el pacto libertad-democracia-capitalismo se necesita una política de ultraderecha caracterizada por el intento de naturalizar la división entre la gente y para ello el racismo y la xenofobia son el arma número uno. “Ese es el momento europeo”.
Al referirse a los elementos fundamentales de la teoría de la era del pueblo y de la ciudadanía, precisó que el tema de la revolución ciudadana empieza con una forma nueva de acción política inventada en Argentina, primero, y después en Ecuador.
Ahí el pueblo sale a la calle y dice “fuera el gobierno”, ola que pasó de América del Sur a las comunidades árabes, hasta que hoy, en Francia, lo usamos como una forma política: el “fuerismo”.
El término “pueblo”, detalló, integra a la clase obrera y a casi todo el resto de la sociedad (desempleados, jubilados, estudiantes, etcétera), que tienen en común la dependencia de reproducir su vida material en las redes colectivas: gas, electricidad, agua, educación, entre otros.
En esa dependencia se construye una nueva realidad sociológica: el pueblo, que se constituye en una realidad política, explicó Mélenchon en presencia de Jeanette Moreno Casas, coordinadora del Centro de Estudios Europeos de la FCPyS.
El pueblo es un actor político cuando la gente pide control sobre la sociedad en un momento en el cual el capitalismo no puede soportarlo, porque necesita ser libre de actuar, con un mercado libre, y para eso expulsa las reglas, normas y leyes. De ahí que “la oposición entre nosotros y ellos, entre el pueblo y la oligarquía, es una nueva confrontación”.
Ante estudiantes, académicas y académicos reunidos en el auditorio de la entidad universitaria, mencionó que hoy vivimos el choque del cambio climático, y puede ser que eso acabe en un fracaso general de la civilización humana. No hay tiempo: 2024 fue el año más caluroso de la historia de México, por ejemplo. Se trata de un fenómeno irreversible, por lo que habría que preparar una “sociedad de ayuda” para afrontar sus consecuencias inevitables; no obstante, el capitalismo actúa al contrario.
El ciclo mercancía-dinero-mercancía funciona como un suicidio, pero el capitalismo es incapaz de corregirse. Es la primera vez en la historia que vemos un sistema económico capaz de condenar al mundo entero al fin de la civilización humana como la conocemos, alertó el experto.
En Europa, relató, hemos conocido 70 años de progreso social. Ahora lo único que percibimos es el retraso social y el crecimiento de la desigualdad. “Es terrible: cinco personas en Francia tienen más que 27 millones, y en el mundo uno por ciento de la población tiene el 43 por ciento de toda la riqueza. Ello conduce directamente a la violencia”.
El tercer punto es la mutación geopolítica. Estados Unidos y China intercambian el papel de dominación económica; el primero lo está perdiendo e intenta reconquistarlo. Los países se preparan, no para las consecuencias del cambio climático, sino para la guerra. Empero, Rusia tiene armamento nuclear y “nosotros también; no hay victoria posible”. La lucha política tiene por objetivo a la civilización humana.
Tenemos que interpretar lo que vemos en el mundo que vivimos con un marco teórico; sin él, la práctica es ciega. Hay que aprender a estudiar, comprender lo que está pasando y elegir nuestra propia intervención en ello. Hay que describir e interpretar bien; si nos equivocamos no quedara nada de nosotros, sostuvo.
En la sesión, Jean-Luc Mélenchon resaltó el papel de las mujeres: todas las revoluciones sociales, como la francesa y la mexicana, se iniciaron con su intervención. Con ellas surge un “pueblo nuevo” en la escena política, y eso lo cambia todo.
El político reiteró que la revolución ciudadana es el resultado de la confrontación entre la oligarquía y el pueblo. ¿Qué quieren los que la hacen? Controlar su vida; para ellos la política es algo sucio, de partidos corruptos, etcétera, y no quieren más de los políticos y partidos tradicionales.
Respecto a la inteligencia artificial comentó que se trata de la automatización de algunos procesos intelectuales humanos; “hay que preguntarse cómo se usa y a quién le pertenece. No debemos permitir que sea una propiedad privada. Eso también es parte del contenido de la revolución ciudadana, porque queremos ejercer el poder. Eso quiere decir ciudadanía. Hoy el mundo pertenece a los que lo pueden comprar, no a todos; ese es el cambio que debe surgir.
Al hacer uso de la palabra, Alejandro Chanona rememoró que Jean-Luc Mélenchon ha participado tres veces en las elecciones presidenciales de su país, mejorando sus resultados en cada una. Es el copresidente del Institut La Boétie, centro de pensamiento dedicado a la formación y elaboración teórica al servicio de las prácticas intelectuales. Fue condecorado como Gran Oficial de la Orden de Mayo, en Argentina, por sus aportaciones en la lucha contra la dictadura.
Una de sus contribuciones más importantes al pensamiento teórico de izquierda es la teoría de la era popular y la revolución ciudadana, expuesta en varias de sus obras. Es autor de 23 libros, entre los cuales destaca “¡Ahora el pueblo! Hacia la revolución ciudadana”, de 2023, y recientemente publicado en español.
FUENTE: UNAM
