DESARROLLO DE HABILIDADES A PARTIR DE VALORES

 

UNO MENOS

Por Salvador Farfán Infante

El desarrollo de habilidades sociales y del pensamiento a partir de valores, es esencial sobre todo en la infancia y la etapa adolescente, porque en esta última se deben tomar decisiones, se establecen relaciones de amistad y noviazgo, y se elige el oficio o la carrera profesional, es decir, los jóvenes se preparan para establecer su proyecto de vida.

El análisis reflexivo y con propuestas es indispensable para la formación adecuada de valores; esto significa que el desarrollo del pensamiento crítico es forzoso para poder observar en su dimensión la influencia del grupo de amistades y los mensajes consumistas de los medios de difusión que manipulan y crean en los individuos docilidad, conformismo y ausencia de un pensamiento crítico.

Asimismo, promueven y reproducen la violencia en sus múltiples manifestaciones, o la lucha permanente por alcanzar modelos estéticos impuestos, propiciando una insatisfacción permanente que, en ocasiones, conlleva depresión, violencia, consumo de drogas, práctica de relaciones sexuales de riesgo, etcétera, generando sujetos con grandes dificultades para resolver situaciones y problemas cotidianos.

Un hombre o una mujer cuyo pensamiento creador se desarrolla y ejercita de manera permanente, difícilmente podrá ser influido por la publicidad, las modas o el grupo de amistades, puesto que permanece alerta ante cualquier forma de manipulación, y cuenta con elementos que le permitirán mantener una postura firme y congruente con su decir y hacer, lo que significa que tendrá argumentos para evitar la invitación al consumo de sustancias tóxicas, reconocerá situaciones de violencia, sabrá evitar involucrarse en ellas y podrá resolverlas, además de que tendrá posibilidades de cuidar su salud y tal vez la de otros. En ese sentido, el individuo posee un pensamiento que le permite fortalecer su autoestima, desarrollar un proyecto académico, así como plantear y realizar un proyecto de vida.

Cada persona debe descubrir y analizar la conformación de los valores, construirlos y desarrollarlos de forma creativa y en interacción social. Sólo a partir del desarrollo de la creatividad, la reflexión y la crítica se desarrollarán valores éticos que contribuyan a la construcción de proyectos de vida individuales y colectivos.

 

Fuente: Habilidades para la vida “Centros de Integración Juvenil”