Gelmin Omar González Hernández
Agencia Reforma
Quintana Roo, México 2 diciembre 2023.- El Aeropuerto Internacional de Tulum, construido por militares en medio de la selva, fue inaugurado ayer por AMLO. Antes de la ceremonia, se registró una lluvia, que dejó en evidencia goteras en el nuevo inmueble.
Varios niños se tapaban la cabeza debido a un hilo de agua que caía del techo y se cuidaban de no pisar un charco que ya había formado una gotera. Eran parte del coro Ixchel, de Chetumal, que viajó tres horas y media para participar en la inauguración del nuevo Aeropuerto Internacional «Felipe Carrillo Puerto».
El grupo, formado por niños de hasta 15 años de edad, fue ubicado -por personal militar- en una especie de grada cercana al elevador y a las escaleras eléctricas.
Quedó en la parte más alejada del templete de funcionarios, detrás de varias filas de sillas ocupadas por militares vestidos de civil que hicieron las veces de público.
Los niños llevaban esperando alrededor de una hora y media cuando, a pesar de los 27 grados de temperatura, comenzó a caer una constante lluvia.
Varias goteras se formaron desde el domo de cristal, una de ellas en el sitio donde se encontraba el coro privado que cantó la canción «Suéñame Quintana Roo».
«Que traigan un trapeador», pidió una maestra.
«Pues ya qué, siquiera que los niños se entretengan con eso», agregó resignado otro maestro.
Al mismo tiempo, se observaron otras goteras en esa zona del aeropuerto cercana a los mostradores, el elevador y las escaleras eléctricas.
«Aquí», «ahí, «aquí», decía apresurado un mando del Ejército mientras señalaba los lugares donde caía agua y era necesario secar el piso.
La preocupación era que la zona de goteras más tarde sería recorrida por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Personal militar y de limpieza sacó trapeadores y jergas para secar, pero la lluvia arreció en algún momento y las goteras aumentaron.
Los trabajos de limpieza de última hora se prolongaron por espacio de 30 minutos, hasta un minuto antes de que el Mandatario hiciera su aparición, cuando ya no llovía.
Entre rumores sobre su estado de salud, el Mandatario llegó acompañado de su esposa, Beatriz Gutiérrez, y del Secretario de Marina, José Rafael Ojeda.
Contrario a otros actos públicos, López Obrador no se acercó a la gente para saludar, tampoco se tomó fotografías; sólo levantó el brazo izquierdo para saludar mientras se dirigía al templete. No saludó ni a la Gobernadora Mara Lezama.
Cuando el evento inició -con una hora de retraso-, una niña del coro se sintió mal, por lo que sus maestras la sentaron en una silla y le dieron a tomar gatorade.
«Es que hace mucho calor y no hay aire (acondicionado)», se quejó una asistente al evento mientras la niña trataba de respirar con normalidad.
De clase mundial
El nuevo aeropuerto, construido en medio de la selva en un año 5 meses, está listo para operar, pero con algunos detalles faltantes, sin contar las goteras en el domo.
Por ejemplo, hay techos sin pintar; no hay aire acondicionado, o al menos no se usó ayer; y todavía se hacen trabajos de mampostería.
La Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), encargada de su construcción, afirmó ayer que el aeropuerto de Tulum es de clase mundial.
«Esta obra ha representado un desafío por los aspectos técnicos, logísticos, ambientales y de prospección arqueológica, superpuestos en cada minuto de su edificación», señaló el General Gustavo Vallejo.
«Con la inauguración de esta instalación aeroportuaria volvemos a enviar un mensaje claro: de que en nuestro país pueden realizarse grandes obras de infraestructura con calidad y sin alterar presupuestos y tiempos de construcción, bajo los principios de austeridad republicana establecidos para el servicio público», agregó el encargado del cuerpo de ingenieros militares.
La Gobernadora Lezama sostuvo que la terminal aérea, que costó 3 mil 200 millones de pesos, es una muestra de que el dinero alcanza cuando se combate la corrupción.
«Esta (es una) gran obra. Una vez más gracias, señor Presidente. Que Dios las y los bendiga siempre. Larga vida al aeropuerto de Tulum, Felipe Carrillo Puerto», exclamó.
La morenista detalló que esta terminal es la cuarta enfocada en vuelos comerciales en la entidad.
«Seremos el estado con mayor infraestructura aeroportuaria certificada (…) y también fortalecernos aún más la conectividad aérea del País».
De acuerdo con estimaciones oficiales, agregó Lezama, en su fase inicial el aeropuerto tendrá la capacidad de atender hasta 32 mil operaciones anuales y una afluencia de 5 millones de pasajeros.
Detalló que las primeras aerolíneas que operarán en Tulum son las internacionales American Airlines, Delta y Spirit, además de las nacionales Aeroméxico , Viva Aerobús y Mexicana.
Slim y el hijo
Para la inauguración del aeropuerto, que se estrenó con un vuelo de Viva Aerobús que llegó procedente del AIFA, el Ejecutivo invitó a empresarios como Carlos Slim, y otros que participan en la construcción del Tren Maya.
A dos semanas de que AMLO inaugure el Tren, en su tramo Campeche-Cancún, el Mandatario hizo un reconocimiento a la Iniciativa Privada por segundo día consecutivo.
Incluso, agradeció uno a uno a empresarios como Slim, de Grupo Carso; Guadalupe Philips, de ICA; Joao Parreira, de Mota Engil, y Manuel Muñozcano, de INDI.
«Nos acompaña también, y le agradecemos mucho porque todo esto, entre otras cosas, del aumento al salario mínimo ha sido por acuerdos y diálogo con empresarios, como Carlos Slim, que nos acompaña», expresó López Obrador.
El tabasqueño también mencionó a empresarios afines a la 4T, como Alfonso Romo, de Alfa; Daniel Chávez, de Vidanta, y Miguel Rincón, de Bio Pappel.
Otros empresarios que asistieron fueron Alejandro Bailleres, de Grupo Val; Eduardo Tricio, de Lala, y Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial.
López Obrador se hizo acompañar de miembros de su gabinete, de los Gobernadores de Campeche, QR, Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Tabasco y Puebla, así como de su hijo Andrés López Beltrán.