AVANZAN LAS CONVERSACIONES DE PAZ ENTRE EL GOBIERNO COLOMBIANO Y EL ELN

Las delegaciones del Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) concluyeron el cuarto ciclo de negociaciones de paz en Caracas, marcando un hito importante en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto armado en Colombia.

 

Durante tres semanas de conversaciones, ambas partes lograron avances en la construcción de un cese del fuego que tiene el potencial de poner fin a décadas de violencia en Colombia. Estos avances reflejan el compromiso mutuo de trabajar hacia una paz duradera y un futuro más estable para la nación sudamericana.

 

El representante del Gobierno colombiano, Otty Patiño, compartió su entusiasmo por los logros alcanzados en estas conversaciones, destacando que los nuevos acuerdos los acercan más a la anhelada paz que anhela la nación colombiana.

 

Sin embargo, la noticia de nueve muertes en enfrentamientos entre el ELN y el Estado Mayor Central (EMC), una disidencia del pacto de paz que desarmó a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en 2017, pone de relieve los desafíos persistentes que enfrenta el proceso de paz. Estos enfrentamientos tuvieron lugar en el municipio de Puerto Rondón, cerca de la frontera con Venezuela, y dejaron además cinco heridos, incluida una joven indígena de 14 años. Aunque no se ha confirmado si las víctimas son guerrilleros o civiles, este incidente subraya la necesidad urgente de avanzar en el proceso de paz.

 

El objetivo central de estas conversaciones es buscar un acuerdo de desarme entre el ELN y las disidencias, con la participación activa del presidente colombiano Gustavo Petro. Se ha dado énfasis a la creación de «zonas críticas» en regiones históricamente afectadas por la violencia, como el Bajo Calima y San Juan en el Valle del Cauca, como un paso crucial para proteger a las comunidades más vulnerables.

 

El acuerdo de Caracas también incluye la implementación de acciones humanitarias y garantías para el cumplimiento del cese al fuego, así como la participación activa de las comunidades en el proceso de paz y proyectos de desarrollo social en estas áreas críticas. Se espera que en las próximas semanas las delegaciones visiten estas regiones para llevar a cabo estas medidas.

 

A pesar de los avances logrados, el líder del ELN, Pablo Beltrán, ha señalado que el cese al fuego ha enfrentado obstáculos, incluida una campaña mediática en contra y ataques a comunidades que intentan supervisar el proceso de paz. Estos desafíos subrayan la necesidad de un compromiso continuo y la colaboración de todas las partes involucradas para lograr una paz sostenible en Colombia.

 

La finalización de este cuarto ciclo de conversaciones representa un hito importante en la búsqueda de la paz en Colombia. A pesar de los obstáculos, estos avances muestran que la paz es posible y que el camino hacia la reconciliación y el progreso continúa. Las delegaciones reafirman su compromiso con un diálogo constructivo y esperan avanzar hacia una Colombia más pacífica y justa en los próximos ciclos de negociación