Por Edgar Hernández*
@LineaCaliente
Más rápido que aprisa la titular del asilo más antiguo de México, la “Casa Hogar del Adulto Mayor Mariana Sayago”, María Fernanda Beltrán García, entró en pánico ante las repetidas denuncias sobre sus pillerías y malos tratos.
La “licenciada”, como gusta le digan, borró sus imágenes en Instagram, TikTok y Facebook en donde su orgullo es posar semidesnuda con actitudes obscenas.
Sin embargo, lo que esconde el fondo no es la frivolidad de esta mujer, sino el mal trato y corrupción contra los adultos mayores.
Tras denuncias públicas busca desaparecer de las redes sociales toda evidencia de malos tratos a la gente de la tercera edad y personal médico y administrativo, así como la restricción de medicinas y racionamiento de los alimentos.
Lo más grave, sin embargo, lo constituye haberse apropiado de los depósitos de las pensiones mensuales y las tarjetas bancarias del Bienestar por cientos de miles de pesos que han dejado en la inopia a los adultos mayores de este otrora prestigiado asilo.
La nueva titular exige moche a los proveedores de alimentos a quienes se les ha pedido reduzcan la entrega de alimentos y no más variedad en frutas y verduras, ahora son mono menús de arroz con papas.
Hay testimonios de que los viejitos del “Asilo Sayago” reciben maltrato y son discriminados no por el personal médico y de servicios, sino por la misma bipolar María Fernanda Beltrán García y sus tres allegadas.
Los familiares de los asilados no son recibidos por esta mujer que gusta mostrar su palmito en los llamados “Reels” y se apoya en la policía -IPAX-para vigilar a los empleados a quienes califica de “rateros”.
En el asilo nadie se puede quejar y menos manifestarse ante su dignísima presencia.
La directora, que se presume como “doctora” -en el directorio de la Secretaría de Salud, SESVER, así se presenta- pero prefiere que la identifiquen como “licenciada”, aunque en realidad no aparece su título en el Registro Nacional de Profesiones, tiene amenazado al personal.
Se afana en despedir a como dé lugar a los de confianza que llevan años ya que la fila de chairos está tocando las puertas para ganar aviadurías.
Los especialistas médicos y personal de enfermería, al igual que cocineras y proveedores no soportan su mal genio y accesos de histeria de esta chamaca de 22 años, chaira aspirante a fifí.
Empleados de la Casa Hogar del Adulto Mayor «Mariana Sayago» han hecho pública una carta abierta en donde denuncian que enfrentan una situación crítica desde hace más de 17 días, debido a la suspensión de compras de insumos.
Sostienen que “esta medida ha afectado a los adultos mayores, quienes no disponen de una alimentación adecuada ni acceso a medicamentos esenciales”.
De acuerdo con los testimonios, desde la llegada de Beltrán García su mando se ha caracterizado por una actitud altanera y amenazante.
Asimismo, señalan que “cuenta con el respaldo de Tarheni Andrea López Herrería, subdirectora de la Administración del Patrimonio de la Beneficencia Pública de Veracruz, quien la apoya de manera incondicional”.
Tarheni Andrea López Herrera presume, sin mayor prueba, ser la nieta del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Al asilo desde hace dos semanas les urge el abasto de medicamentos controlados indispensables para algunos residentes y “a ello se suma la deficiente alimentación misma que ha puesto en riesgo a los residentes, porque la mayoría de los ancianos tienen enfermedades que deben tratarse de manera diferente con cuidados específicos”, manifiestan.
El argumento de la directora es que no existen recursos suficientes para la compra de alimentos y que la escasez de medicinas es “un problema a nivel nacional”.
Los quejosos comentan además que, a las amenazas de despido, se suma la restricción a los permisos, exigiendo que se soliciten con 15 días de anticipación.
“Por lo anterior, los trabajadores de esta noble institución solicitamos la intervención urgente del secretario de Salud, Valentín Herrera Alarcón, para que tome las medidas necesarias que protejan el bienestar de los residentes y que se nombre a una nueva directora con empatía hacia las personas del asilo”.
María Fernanda, en tanto, flota, simplemente le vale madre.
No permite que nadie entre a su oficina y presume fuertes respaldos con las “cacas grandes de SESVER” y, por supuesto, con la supuesta nieta de López Obrador.
Esta historia de abuso de poder en el asilo “Sayago” continuará.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo
