Manuel Alejandro Álvarez Torres
Agencia Reforma
Ciudad de México 2 septiembre 2024.- En su sexto y último Informe de Gobierno, el Presidente Andrés Manuel López Obrador organizó una consulta a mano alzada, en pleno Zócalo, para justificar que el pueblo respalda la reforma al Poder Judicial y, de paso, enviar un mensaje al Gobierno de Estados Unidos.
Frente al lleno de la Plaza de la Constitución y dejando de lado el discurso que llevaba escrito, el Mandatario pidió a sus seguidores levantar la mano para dejar en claro si quieren o no que la mayoría oficialista en el Congreso modifique la Constitución, para someter al voto en las urnas a Jueces, Magistrados y Ministros.
«A ver, aquí vamos a hacer una consulta, ustedes qué prefieren, ¿que a los Ministros los elija el Presidente y los senadores o que los elija el pueblo?», preguntó.
«A ver, que levanten la mano los que piensan que es mejor que a los Ministros, Jueces y Magistrados los elija el pueblo.
Bájenla. Abstenciones, que levanten la mano. No hay abstenciones», sostuvo.
Tras la «votación», el Jefe del Ejecutivo arremetió contra Estados Unidos, cuyos funcionarios, legisladores, empresarios y hasta representantes diplomáticos han lanzado alertas sobre los «riesgos» que implica la aprobación de la reforma judicial, tanto para la democracia, como para la relación comercial.
«Esto ayuda a entender cuál es el sentimiento del pueblo. Y también para que lo internalicen nuestros vecinos, amigos y vecinos de Estados Unidos, lo digo con todo respeto», sentenció.
«Y que no olviden que la democracia en América, en Estados Unidos, comenzó eligiendo a los jueces, que no olviden eso, que en Estados Unidos así comenzó la democracia, eligiendo el pueblo a los jueces. Y si quieren bibliografía, que busquen ‘La democracia en América’, de Tocqueville, ahí está cómo se fundó esa gran nación, a partir de la democracia».
Previamente, López Obrador reprochó a los integrantes del Poder Judicial que se hayan negado a bajarse el salario para ganar menos que el Presidente.
En respuesta, los simpatizantes del tabasqueño exigieron la salida de la presidenta de la Suprema Corte, la Ministra Norma Piña.
«¡Fuera Piña! ¡Fuera Piña! ¡Fuera Piña!», se escuchó gritar a los asistentes, por lo menos en dos ocasiones en el Zócalo, donde también aparecieron pancartas y afiches con la leyenda en contra de Piña.
Captura de capos no pone fin a problema de fentanilo El Presidente Andrés Manuel López Obrador cuestionó ayer la estrategia de combate al narcotráfico implementada por el Gobierno de Estados Unidos, al poner en duda que la captura de capos de la droga pueda poner fin a los problemas de adicción al fentanilo que padecen.
«¿Por qué hay tanto consumo? ¿Que no tiene que ver con el desamor, con la desintegración en las familias, con el abandono a los jóvenes? ¿Y qué, se va a resolver el problema sólo deteniendo a capos del narcotráfico? ¿Se va a resolver el problema desapareciendo el fentanilo? Si hay consumidores, van a inventar otra sustancia igual o peor de terrible, de peligrosa, mortal, porque ahí está la demanda», sostuvo.
Durante la lectura de su sexto Informe de Gobierno, el mandatario hizo un reconocimiento al papel de las Fuerzas Armadas y confió en que, en el mes que resta de su sexenio, no se conozca de algún caso de colusión de funcionarios y bandas criminales, ni se registren asesinatos de políticos.
«Otra cosa que es importante: no permitir el contubernio entre autoridades y delincuencia. Eso nos permitió bajar, reducir al mínimo los crímenes de funcionarios públicos, los crímenes de políticos. Eso -toco madera- no lo hemos padecido», dijo.
Además, sostuvo que en México no hay un narcoestado, como ocurría en el Gobierno de Felipe Calderón.
«A diferencia de lo que sucedía en sexenios neoliberales, ahora no se reprime al pueblo, no se ejecutan masacres, no se desaparece a nadie, no se tortura, no se tolera la violación de derechos humanos y tampoco existe un narcoestado, como el que se configuró en el sexenio antepasado», dijo.
López Obrador sostuvo que, de acuerdo con el Inegi, la percepción de inseguridad en el país es la «menos mala» de los últimos 10 años.
«Según la encuesta trimestral de Inegi, la percepción en materia de inseguridad es la mejor o menos mala de los últimos 10 años, es el 59.4 por ciento, 15.5 por ciento menos que cuando inició nuestro gobierno», añadió.
Potencia mundial
El Presidente aseguró que México es una potencia mundial y que nadie debe acomplejarse ante poderes hegemónicos y agendas de organismos internacionales.
«Ya basta de complejos, porque ni nos vamos a acomplejar, ni vamos a permitir que nos sigan acomplejando, México es una potencia cultural en el mundo», señaló.
El País ha salido adelante, agregó, sin necesidad de aceptar agendas impuestas por organismos internacionales o poderes hegemónicos.
«Ha quedado demostrado que se puede gobernar en beneficio de todos los mexicanos sin aceptar recetas, modelos o agendas impuestas por organismos financieros internacionales o por poderes hegemónicos de cualquier signo político o ideológico.
«En todo el sexenio, aunque fuimos atacados y calumniados por nuestros adversarios, como pocas veces se ha visto en nuestra historia, jamás perseguimos o censuramos a nadie», señaló.
López Obrador aprovechó para mandar «al carajo» a los oligarcas que quieren democracia sin pueblo.
«Democracia se compone de dos partes -demos-kratos-. Democracia es el poder del pueblo; lo que quieren los oligarcas es kratos sin demos, quieren poder sin pueblo, al carajo con eso.
«Demostramos que se puede transformar con el apoyo del pueblo, aunque se tenga en contra a poderes oligárquicos y medios de información, o medios de manipulación que en otros tiempos imponían modo de pensar y actuar en beneficio de sus intereses», reiteró.