Alejandra Benítez
Agencia Reforma
París, Francia 19 agosto 2024.- Emma Hayes es la mujer que le devolvió la grandeza al equipo femenil de Estados Unidos, esta entrenadora se formó por más de una década en las filas del Chelsea.
Su carrera como estratega la armó año con año, con la experiencia que tomaba en cada torneo de Liga, en cada curso, en cada experiencia.
La primera y la más cruel, la vivió a los 17 años cuando se rompió el tobillo, se quedó sin cartílago y esto le impidió volver a tocar un balón.
Por eso tomó la pizarra y se hizo entrenadora, aprendió desde el dolor, se caracterizó por entender a sus dirigidas y sacó lo mejor de cada una de ellas.
Hayes, nacida en Londres hace 47 años, no necesitó de psicólogos o motivadores para crear su propia estrategia dentro de sus equipos.
Las jugadoras estadounidenses revelaron que las deja ser, dentro y fuera de la cancha, durante las concentraciones, incluidos los Juegos Olímpicos, tenían karaoke, podólogos y continuas sesiones de TikToks.
La delantera Trinity Rodman aseguró que nunca antes se había divertido tanto, la presión desapareció en un equipo que sufrió un duro revés en el Mundial pasado cuando fue eliminado en los Octavos de Final por Suecia.
Parecía que Estados Unidos pasaba por una fuerte crisis, que no se acostumbraban a la ausencia de líderes como Megan Rapinoe o Alex Morgan, pero este año apareció Hayes y dio vuelta a la hoja.
Sus primeras acciones fueron de apoyo para la sangre joven porque sabe que con ellas volverá a los primeros planos en el siguiente Mundial, les pidió regresar al puesto número uno del mundo y lamentó no enfrentar a España en una Final, ya que tenía deseos de verse frente a frente con una de las mejores exponentes de Europa.
La entrenadora estuvo 12 años con el Chelsea, con las que ganó la Woman’s Super League siete ocasiones, incluida una racha de cinco títulos consecutivos desde el 2019 hasta el 2024.
Además de futbol, también le encanta hablar de política, sabe todo sobre el momento que vive Gran Bretaña, los conflictos bélicos y también sobre las próximas elecciones que habrá en Estados Unidos.
Después de que se terminó su carrera en el futbol, apoyó a su padre en varios negocios, vendió boletos para el teatro y estuvo al frente de una panadería en Londres.
«Fui sacando mis títulos durante la carrera. Si me hubiera convertido en una entrenadora con los títulos, nunca habría estado preparada para hacer este trabajo. Los títulos de entrenadora no te enseñan a lidiar con la gente y a afrontar los verdaderos retos del día a día», confesó a CouchesVoice.
«Es algo que digo ahora a los entrenadores y las entrenadoras jóvenes: ‘Eso no se compra’. Yo estaba empeñada en llegar a la cima lo antes posible, pero recuerdo que un muy buen amigo mío entrenador me dijo: ‘No te saltes ningún paso’. Mis experiencias hicieron que, cuando el Chelsea llegó a la Final de la FA Cup femenina de 2015, estuviera preparada».
Estados Unidos la tenía en el radar y los directivos no se equivocaron cuando le hicieron la propuesta. Emma Hayes lo pensó con detenimiento, se sintió halagada porque le entregaban a una Selección que esperaba a una estratega diferente para iniciar su regreso a la gloria.
Por lo pronto ya tiene una medalla de oro de los Juegos Olímpicos, la quinta para el equipo de las barras y las estrellas, pero viene lo mejor, las eliminatorias y el Mundial del 2027.
@ABenitezCANCHA