Iván Sosa
Agencia Reforma
Ciudad de México 31 mayo 2024.- El mayo de este año fue el mes más caluroso que ha vivido la Ciudad de México en toda su historia.
No sólo 13 días alcanzaron su registro más elevado, sino que además el récord de temperatura máxima histórica se rompió tres veces en el mes, de acuerdo con los datos del Observatorio Tacubaya, donde se ha medido la temperatura de la Capital desde 1877.
El 24 de mayo, se alcanzaron 34.7 grados, una marca que no suena tan alta, si se le compara con el calor que se ha vivido en otras partes del País durante esta misma temporada, como es el caso de los 46 grados o más que se vivieron el 7 de mayo en las estaciones de Ciudad Altamirano, Guerrero; Boquilla Oaxaca, y Garro, Veracruz.
Sin embargo, para la CDMX, estos registros reflejan el aumento dramático de la temperatura que se alcanzó este año.
De acuerdo con datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la temperatura media, con base en las cifras del 1 al 27 de mayo, fue 2.17 grados más alta que la que se había alcanzado en mayo de 1998, que era registro más caluroso para ese periodo.
El SMN también indicó que el abril de este año fue el más caluroso del que se tenga registro.
Para el investigador del Colegio de Geografía de la UNAM, Oscar Rivera, las altas temperaturas son reflejo del cambio climático resentido en la Ciudad.
«Si no se establece una gestión de riesgo, con medidas de contención, de mitigación, esto se repetirá en los próximos años, el cambio climático es una realidad que está mermando la tranquilidad», apuntó Rivera.
En las zonas más urbanizadas, en donde las áreas rurales y verdes han sido cubiertas por pavimento de calles y concreto de edificaciones, las islas de calor producen temperaturas más altas, lo que a su vez multiplica la demanda de agua, explicó.
«La extracción de los pozos se intensifica; con la problemática de sequía en el Cutzamala se necesita tomar más agua subterránea y entonces se deseca el subsuelo, que se empieza a compactar y fracturar, lo que puede influir en fenómenos como la falla geológica Plateros Mixcoac», apuntó Rivera.
La temperatura de una Ciudad es un factor que afecta también la disponibilidad de agua, los niveles de contaminación del aire y la salud de los habitantes.
«Hay daños a la salud con golpes de calor en personas sensibles y enfermedades respiratorias por aspirar ozono, se suma el riesgo de tener más enfermedades de origen tropical, como el dengue, que con el calentamiento escalan a las altitudes urbanas», apuntó Rivera.
Tan fuerte es la relación de la temperatura con la calidad del aire, que este año ya se convirtió en el mes más contaminado de la última década. De acuerdo con los registros del Sistema de Monitoreo Atmosférico (Simat), 2024 acumula 12 contingencias -la última, detonada el jueves y activa hasta ayer por la tarde-. Solamente mayo sumó siete.
En 1993, posterior al surgimiento del Hoy No Circula, la verificación de emisiones y el programa de contingencias, también se produjeron 12 emergencias ambientales. En aquel momento, los criterios para activar una emergencia ambiental eran menos estrictos.