DEJA GALINDO EL AYUNTAMIENTO DECEPCIONANDO A CAPITALINOS

* El alcalde que solo se dedicó a viajar por el mundo desentendió pendientes de suma importancia, como la inseguridad y la falta de agua

* De igual forma, presuntamente se le señala de diversos actos de corrupción, como la compra de un jet privado y la simulación de licitaciones en obra pública

 

Con más inconvenientes que resultados, es como dejó Enrique Galindo Ceballos su cargo como presidente municipal de la capital potosina para buscar la reelección, lo que causó indignación entre los ciudadanos porque consideran que aún hay muchos pendientes importantes que resolver, como la inseguridad, la falta de agua, los apoyos sociales, entre otros.

 

Así mismo, a Galindo presuntamente se le relaciona con una gran cantidad de actos de corrupción, como la compra de un jet privado con el dinero de las arcas capitalinas, mismo recurso que utilizaría, recientemente, para promocionar su imagen en redes sociales y medios digitales de cara a las campañas políticas, esto, utilizando empresas fantasmas para desviar el recurso público.

 

De igual forma, Galindo habría simulado licitaciones de su programa “Vialidades Potosinas” a favor de empresas regiomontanas de su compadre e integrante de su gabinete, José Nazario Pineda Osorio, director de Obras Públicas que ocupó el mismo cargo en Monterrey, NL.

 

Por otra parte, el alcalde viajero lucró con la falta de agua al hacer negocios con el empresario Santiago Rosillo del Pozo, quien fue señalado por supuestamente vender pipas de agua a través de su empresa Grupo Sassero, sin embargo, se descubrió que ésta no cuenta con una sola unidad de reparto del vital líquido; aun así, Galindo le pagó más de 11 millones de pesos por el fingido servicio.

 

En cuanto a obra pública, Galindo entregó un solo proyecto, el desnivel de Himalaya, cuando en un principio había informado de un magno plan de movilidad que incluían varios puntos de la ciudad, pero solo encontró repudio entre sus gobernados, como en la zona de El Saucito, en donde no contó con el respaldo de los ciudadanos para construir un desnivel vehicular.