Línea Caliente
Por Edgar Hernández*
Un frío temor recorre las arterias morenas.
El fracaso inicial de la zacatecana Roció Nahle, el rumor de que Cuitláhuac deja la gubernatura por ser un estorbo, el inusitado crecimiento de Pepe Yunes y el temor de cárcel para los saqueadores del erario, tiene apanicados a los morenos.
La situación se ha crispado luego de que la oposición legislativa en el Congreso local documenta y hace públicos robos y desvíos millonarios en las dependencias del gobierno.
Mientras a nivel federal, en la Cámara de Diputados, persiste la exigencia de cuentas claras ante repetidos subejercicios y partidas presupuestales que no tienen explicación.
A ello se suman los desvíos multimillonarios en los poderes legislativo y judicial al descubierto.
Sigue además sin explicación de dónde ha salido tanto dinero para la campaña de Nahle que ha sido por demás ostentosa por el dispendio.
Todo para que no levante.
Esta mañana la prensa nacional de nueva cuenta insiste en la licencia de Cuitláhuac para incorporarlo a la campaña de Sheimbaun, situación que de darse no reflejaría más que una exigencia de que abandone la plaza para buscar recomponerle el camino a Nahle mas no porque el actual gobernador sea una pieza sustantiva para la victoria de la corcholata.
Así, hoy que en los hechos la simpatía ciudadana hacía el opositor Pepe Yunes se está traduciendo en la esperanza para Veracruz, en la contraparte se percibe el temor de que les revisen las cuentas.
A lo largo del sexenio se han denunciado brutales desvíos de dinero, se hizo público incluso el tema de las maletas, que no cajas de huevos, que presuntamente se entregaban tras cada visita de López Obrador.
Y no dejaba de llamar la atención el tema de los moches al quedar al descubierto que el 99% de los contratos de obra pública del gobierno estatal eran directos, sin licitaciones.
¿Y la fundación multimillonaria #Unidostodos del Subsecretario de Finanzas, Eleazar Guerrero, primo del gobernador creada al calor del destape de Nahle?
Las Secretarías de Salud, Seguridad Pública, Sefiplan, Obras Públicas y Turismo han sido -según se ha puesto al descubierto- las principales fuentes del saqueo al erario.
Ni el maquillaje propagandístico oficial lo ha podido ocultar, pero las evidencias ahí están.
Son hechos de los que ha venido tomando nota Pepe Yunes para que en un ajuste de cuentas a partir del 2024 sean aclarados.
De ahí el pánico de los morenos.
De ahí su afán por ganar fuero. De Inscribirse a como de lugar en un cargo de elección popular.
Una curul, un escaño vía plurinominal o de elección nominal o de plano huir como lo hizo el Bola #8 quien en cinco años se convirtió en uno de los hombres más ricos de Veracruz al fincar sus riquezas sobre pilas de cadáveres.
Los negocios y las fortunas ahí están, todas acompañadas de francachelas, todas documentadas.
Hoy ya no es fácil pasar impune, por ello el pánico moreno.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo